-
Formó parte de la revista Músicos en calidad de secretario de redacción y columnista.
Desde 1991 hasta el presente participa como colaborador
especial de la revista El Biombo.
Durante 1997 escribió una columna en el suplemento El Rockero incluido en la colección
CD Rock Nacional de la Revista Noticias.
A partir de abril de 1996 se integra como jefe de
redacción a la revista Music Shop,
de la que sigue siendo parte hoy.
- Miembro fundador del Guitar Club argentino, junto con guitarristas como Pappo, Walter Giardino, Botafogo, Juanse, Walter Malosetti, Ubaldo de Lio, Gabriel
Jolivet, Gabriel Trombetta, Alambre González, Silvio
Furmanski, entre otros.
- Desde principios del 2002 incursiona en el mundo
virtual con su propio sitio www.roascio.com.ar y en abril de ese año se suma a El Rincón
del Guitarrista (www.guitarraonline.com.ar)
sitio único de habla hispana, con un promedio de
1500 visitas diarias, haciéndose cargo de la Consultoría
técnica y de los Test de equipos, instrumentos,
cuerdas, etc.
- Bandas: Dr. Rock / Radio City / Maccioco
y los de goma / Menú Fijo / Autograph / Los Arcontes / Mendigo Jonas / Engranaje / R.C.M.
Esto continúa con su discografía, el listado de
sus trabajos editados, etc.
Aún así, me animé a entrar a su casa. Hablando en
serio, conocer a Marcelo fue recorrer una parte
importante de la historia del rock. Y compartir
ese recorrido fue realmente un placer.Entrevista
Esta banda viene de lejos, ¿Cómo es la historia?
Sí, esta banda tiene dos etapas. Por ahí el que lee eso
piensa “estos deben estar viejos chotos”, porque
si vos ves bandas de esa época, que en realidad
son muy pocas las que quedan, representan su edad,
digamos ¿No? Nosotros éramos chicos y hoy tenemos
la suerte que todavía estamos bien. Hemos pasado
lo nuestro pero hemos sobrevivido.
En los 80 era otra historia, porque... no sé si
era más fácil convocar gente –viste que el problema
mayor de un grupo es que lo conozca la gente-, no
sé si era más fácil, pero se convocaba más. En principio
no estaba tan popularizado el asunto de tocar en
pubs, el lugar era el teatro. El que quería escuchar
música se tenía que tomar el trabajo de ir a un
teatro, a ver a Los Abuelos de la Nada,
a ver a... ya en la época de Sumo empezó Einstein,
el legendario café que estaba en Córdoba al no sé
cuanto, nosotros tocamos ahí, también ahí empezó Soda Stereo. Y nosotros en ese
momento, qué se yo, un Margarita Xirgu, de 700 personas,
lo llenábamos. Hoy en día el tipo que mete 300 personas
es Gardel, Lepera y los dos guitarristas. No sé si no había tantas
bandas o qué pasaba, inclusive la única difusión
que había en ese momento era la Revista Pelo y los
afiches en la calle.
No existía Internet.
¡Obviamente! Y bueno, en ese momento tocábamos, y nos
habían llamado de RCA. Entonces
te llamaba la compañía y ponía su plata, y vos ibas
y grababas cuatro o cinco temas bancado por la compañía,
pero para ver si a ellos les interesaba, ¡Nada más!
Hoy es un delirio atómico ¿Viste?
Ahí ya habíamos cambiado el baterista, ya como que
la banda había llegado a un techo de convocatoria
de gente, habíamos tocado en el último B.A.ROCK,
y bueno, el próximo paso era un disco.
Grabamos pero después no nos llamaban, no nos llamaban,
y fue descartar un poco el asunto, y llegó un verano
en que cada uno se fue de vacaciones, y nunca más
volvimos a ensayar. No nos peleamos, no nos separamos...
sólo que nunca más volvimos a ensayar. No volvimos
nunca de las vacaciones. Se diluyó la banda.
Y después, a fin del 99, nos juntamos en una pizzería
por Corrientes, a comer una pizza ¡A ver como estábamos!
Y salimos, nos estábamos despidiendo en la puerta
y pasa un flaco y dice “¡Uy! ¡Dr. Rock se volvió a juntar!...” ¡Cuatro tipos que no se
habían visto no sé en cuanto tiempo y pasa uno que
te conocía de cara! ¿Viste? ¡Increíble! Así que
bueno, decidimos que había que juntarse. Y así empezó
de nuevo la banda, la segunda etapa que es la actual.
Empezamos con el baterista original, pero como estaba
haciendo percusión con Bersuit Vergarabat,
con Botafogo..., no pudo seguir.
Estuvo invitado en el primer disco haciendo percusión.
Así que llamamos a otro baterista que en aquél momento
había compartido una fecha con nosotros. Fuimos
a grabar el demo a un estudio que estaba armando
un sellito, les gustó, a esta gente le interesó
así que nos llamaron para integrar el sello, así
salió el primer disco. Después a ellos el sello
no les funcionó, y como se dilataba el asunto para
no perder el año grabamos el EP Entretiempo,
como adelanto, con dos temas que van a estar en
el disco y dos covers.
Y justamente hoy terminamos de grabar la pre-producción,
así que en dos semanas calculo comenzaremos a grabar
el otro.
Desde que empezaste a relacionarte con la música,
siempre tu idea fue tocar.
¡Claro! ¡Sabía que no quería estudiar! Yo terminé el
colegio, me metí a trabajar en un negocio de instrumentos
musicales, y ahí empecé. Ahí lo conocí a Botafogo,
por él lo conocí a Pappo, empezó
la cadena... La primer guitarra buena que tuve,
que era una Gibson, se la compré
a Moris. Y sí, siempre toqué. Mucho
tiempo después empecé a dar clases, escribir en
revistas, los libros... pero todo fue consecuencia
de lo mismo.
Por eso te preguntaba, porque editaste un montón
de libros. Pero nunca abandonaste la idea de estar
arriba del escenario.
No, no. Vos le podés enseñar a un chico, o al que quiera
tocar un instrumento, pero la experiencia de tocar
es otra. O sea, los mismos elementos... una cosa
es sentadito en tu casa, y otra es arriba del escenario.
Entonces parte de esa experiencia también se la
trato de transmitir al alumno ¿No? Decirle “bueno,
bárbaro, vos sabés esto, pero lo próximo es pararte...”,
entonces me paro yo también y tocamos, a volumen.
Y ya le cambió la historia. Entonces después le
digo “¡Pensá que adelante vas a tener gente!”. Y
si vos mirás a las bandas jóvenes, no las bandas
profesionales, sino las bandas de chicos que tocan
en pubs, vos fijate que por lo general tocan de
costado, está el batero en el medio y a los lados
uno mirando al otro, tocan medio de costado.
Porque cuando estás ahí... está vacío, no hay una
red de contención, nada. Enfrentar ese agujero es
jodido, y todas esas cosas yo trato de enseñárselas
también ¿No? Eso pasó con los libros. La idea mía
fue siempre... ¡Bah! no es una idea preconcebida,
pero siempre traté de no guardarme nada. Por eso
viste que vos me preguntabas lo del equipamiento...,
porque los pibes que tocan buscan una guía, cómo
sonar digamos. Porque no es solo enchufar la guitarra,
...si tenés tres perillas, ¡cómo ponerlas!, ni hablar
ya de cuando enchufás los pedales y otras cosas.
Entonces bueno, todo es como parte de la enseñanza.
Y lo de la banda es estar... ¿Viste? tocando, y
tocar es como el alimento del músico, sino como
que te frustrás.
Y yo, por más que en realidad ninguna de las bandas
en que toqué era una banda número uno, siempre pude
tocar con músicos conocidos digamos, pero no integrar
una banda, porque tampoco nunca me puse, yo siempre
fui más de hacer la propia ¿No? Por más que haya
tocado con Pappo, con Juanse,
o yo que sé... todos los que figuran por ahí...
Pero tocaste con Pappo no solo porque
sos amigo, tocaste con él porque la guitarra de Marcelo Roascio es “la guitarra”.
¡Bueno! ¡Sí! Pero hay muchos tipos que tocan muy bien
y por ahí no son conocidos ¿No? pero a lo que iba
yo es que por más que nunca tuve una banda número
uno, siempre toqué y siempre estuvo todo bien. Y
si hoy tengo que ir y cargar los equipos no se me
cae ninguna pestaña.
Está bien que uno sepa lo que vale uno, para mí,
adentro, pero para afuera, bajate un poco... Yo
tuve la suerte de poder tocar, conocer y trabajar
con muchos músicos de afuera. Malmsteen,
el batero de Iron Maiden, el violero
de Megadeth..., un montón. Y los
tipos son... ¡Nada! ¿Viste? ¿Entonces qué te queda?
Y de repente acá tenés a cualquier logi que se cree
no se qué... no puede ser, cuando esos tipos son
realmente grosos. Laburar con esos tipos a mí me
enseñó muchas cosas, entonces, yo sé lo que valgo.
Pero ya te digo, si tengo que cargar los equipos,
o si tengo que tocar a las 3 de la mañana, y bueno
¡Tendremos que tocar a las 3 de la mañana!, “...¿No
se escucha el retorno? y bueno, dale para adelante...”.
Está todo bien, estamos tocando, la gente la está
pasando bien... es lo que importa.
Vos me decís que conociste músicos grosos, guitarristas
de nivel internacional, ¿Cómo ves el nivel en Argentina
más allá de haber una oferta infernal?
Hay una oferta infernal, pero ojo con eso, yo todo este
año que pasó estuve de jurado –que es una cosa que
a mí mucho no me gusta, pero se dió de un concurso
en The Cavern de bandas de rock,
y vimos como... ¡140 bandas! A lo largo del año
(2003). De las cuales, si escuchaste hablar de 10,
es mucho. De esas 140 quedó una final de 15, y después
una final de 6. Y de esas, que vos digas “Esta puede
tocar en Cemento, o en Obras...”,
había 3. Al margen de los estilos ¡Eh! Punk, rock,
lo que sea. Y bueno, llegamos a la conclusión de
que el promedio de vida de una banda de hoy es de
tres años. Porque en esos tres años ¿Qué hacen?
Arman la banda, graban el demo... y al toque ya
quieren grabar el disco. Como es tan fácil… ¿No?
Podés grabar el disco y editarlo vos. Y después
como el disco no lo venden, no pasa más nada, y
se separan.
La banda que superó esos tres años, puede ser. Vos
fijate que de las bandas conocidas, no son ningunos
pendejos, todos superan los 30... generosamente
¿No?
Pero el nivel musical, mejor dicho, el nivel instrumental…
por lo general es muy bueno. Pero yo separo el instrumentista
del músico. Para mí el músico es una cosa más completa.
Incluye la teatralización, la puesta en escena...
Sí, eso cuando es la puesta en práctica. Pero el músico
también es el que compone, el que tiene una visión
más allá de su instrumento. El que no se encierra
en lo suyo, el que escucha una canción en su totalidad.
Yo no me ofendo si en una canción no va un solo,
es más, hay temas donde no hay solos porque me parece
que pudro con los solos de guitarra, y me parece
que favorezco a la canción si no están. Entonces
me parece que el músico es como el tipo que tiene
una visión como más abarcativa de la cosa. Y si
compone, o puede arreglar... mejor. Músicos no hay
tantos, pero instrumentistas hay muy buenos.
Pero de esos pocos que hay, para cerrar ¿Sí hay de
nivel internacional?
¡Sííí! ¡Pero de taquito! Si a los tipos de afuera les
gustan los músicos de acá y encima cuando vos les
decís que ese tipo no vive de lo que hace, sino
que está en un kiosco o está en qué se yo... dicen
“¡Imposible! ¿Cómo hacen para tocar...?”, yo que
sé cómo hacen para tocar así, pero lo hacen. Son
muy pocos los que viven exclusivamente de la música,
la mayoría labura de otra cosa.
También hay muchos músicos argentinos afuera trabajando,
y los de afuera, cuando los ven acá, viste, se los
quieren llevar. Estamos al mismo nivel que en cualquier
lugar del mundo. Lo que pasa es que ellos tienen
la ventaja que lo que se edita en EEUU, por ejemplo,
se lo venden al mundo.
Además los medios acá ayudan a difundir lo que editan
allá.
Claro, se hacen eco de lo de afuera antes que de lo de
acá. Eso siempre fue así y parece que va a seguir
así, porque nosotros somos cholulos. Yo por suerte
siempre viajo al interior a hacer clínicas y esas
cosas, ¡Y los del interior miran a Buenos Aires!
¡Las bandas del interior son increíbles! Y por ahí
están equipados hasta los dientes pero los tipos
miran a la Capital, “la cosa tiene que pasar por
la Capital” ¡Y nosotros miramos afuera!
¿Cómo son las clínicas que hacés?
En una clínica, si bien vos demostrás escalas, o técnicas,
o esas cosas... como lo hacés para mucha gente –50,
100 o más- no llega a ser una clase grupal, por
más que te hagan preguntas, pero se podría decir
que es una clase demostración, una cosa así. Vos
le vas pasando una escalita, una base, una partecita
de un tema... o te preguntan cómo se hace tal cosa,
mechás eso con algunos temas tuyos, y eso más o
menos es una clínica.
Lo de las clínicas está bueno porque se popularizó
bastante. En un momento vinieron muchos músicos
de afuera a dar clínicas, y como que al que va le
abre un poco la cabeza, porque las cosas que toca
el tipo son diferentes de lo que hace en un concierto,
porque está tocando ese instrumento específico y
las cosas que hace son específicas de ese instrumento.
Seguís haciendo esto actualmente.
Yo sigo, sí, por suerte. Antes, cuando todavía estaba
el “uno a uno”, durante muchos años me bancaron
marcas, entonces las clínicas las hacíamos con esas
marcas. Y este año que pasó gente del interior me
contactó por Internet para que vaya personalmente,
así que bueno, estuve viajando bastante, y va a
seguir.
Lo de las marcas va a empezar ahora este año, pero
con marcas de acá. Que eso también está bueno, porque
lo que yo siempre les digo a los chicos, -porque
viste que acá todo el mundo tiene 50 mangos para
sacar la entrada para Metallica,
pero nadie tiene 5 pesos para ir a verte a vos ¿No?
¿Cómo es la cosa?- Entonces uno de los mensajes
que trato de dar en las clínicas es que si nosotros
queremos que la gente nos de bola a nosotros, a
los músicos de acá ¿Por qué nosotros no le damos
bola a los fabricantes de acá también, como para
que la cadena continúe?
Por eso yo ahora estoy usando guitarras de acá,
equipos de acá... ojo que antes tampoco podías usar
mucho porque eran un desastre, pero hoy en día tienen
el mismo nivel que el de afuera, y el precio está
mucho mejor. Entonces ¡Bueno! ¡Banquemos a los que
fabrican cosas acá!
Que de paso generan laburo acá...
¡Claro!, generan laburo acá, y de paso te van a bancar
a vos, que estás empezando con tu banda... ¿Viste?
no te va a bancar Fender, lo más
probable es que te banque una marca de acá, ¿Entendés?
esto es un ida y vuelta.
¿Con la banda anduvieron también por el interior?
Poco, porque por cuestiones personales de los integrantes
no pueden moverse mucho. Hacemos Gran Buenos Aires,
los alrededores de la provincia, vamos a Rosario,
pero generalmente son ida y vuelta.
Y de todo eso ¿Qué show, que momento registrás como
“Acá me gustó tocar”?
En Rosario estuvimos en la inauguración de un boliche
motoquero que después lo cerraron, que era un lugar
gigantesco, impresionante, con un escenario alucinante
que parecía Obras. Eso estuvo bueno Pero, de repente
nos pasa que decimos “¡Uh! ¡Esta fecha va a ser
un plomo!...” y resulta que es una fecha bárbara
así que... nunca sabés. Nos gusta mucho tocar en
Ituzaingó, nos llaman siempre, la municipalidad
organiza cosas en la plaza, frente a la estación.
Y están esos shows que te salen redondos, que como
banda son como esos empujoncitos que necesitás en
el camino ¿No? Porque la banda puede sonar bien,
vos podés seguir haciendo temas, las bandas pueden
durar... así como están las que duran tres años,
están las que pueden durar 30. Pero entonces, ¿Qué
es? ¿Cuál es el motor para que sigas con tu banda?
Porque lamentablemente -calculo que es en todo lo
mismo- no es “Qué tan bueno sos”, sino “A quién
conocés”. Y el “A quién conocés se divide en A y
B, “A quién conocés” o “Cuánta plata tenés”.
Vos tenés el punto central que es “Qué tan bueno
sos”, que no es que no importa, pero no es el que
te va a llevar. Si después cuando te hacés conocido
tenés el respaldo de ser bueno, mejor. Pero no es
ese el factor que te va a llevar a que te hagas
conocido.
En uno de los últimos shows del año pasado, no sé
cómo el batero se cruzó con De la Puente.
Fueron él y el bajista a llevarle entradas a la
radio, y al otro día escuchamos: “Estuvieron los
chicos de Dr. Rock,
trajeron las entradas..., van a hacer el show...”,
y pasaron un tema. Así que es eso, “A quién conocés”.
Pero por eso te decía que lo podés hacer así, o
garpando a la Rock & Pop ¿No?
A quién conocés o cuánto tenés. Es lamentable, es
pincharle el globo a mucha gente... pero es así.
Acá y en todos lados ¿No?
Y como dijiste antes, no sólo en la música.
No, claro, calculo que un artista, un pintor para exponer
sus pinturas... pero bueno, la música tiene pequeñas
recompensas en el camino ¿No? De eso vivimos, de
esas pequeñas recompensas.
Y a vos como músico ¿En qué lugar te gustaría estar?
Después de toda esta trayectoria ¿Cuál es esa imagen,
ese sueño?
Realmente el sueño sería que Dr. Rock después de tanto tiempo, se hiciese conocido. Cuando
nosotros tocamos me sorprende a veces, ponele hay
un tema, que va a ser el corte en el disco nuevo,
que me sorprende que la gente lo cante. Entonces,
que algo que vos hiciste acá, entre cuatro paredes,
se lo pasaste a la banda y después lo llevás y que
la gente lo adopte, eso es... una cosa muy fuerte.
Imaginate llevarlo a niveles de éxito real ¿No?
de popularidad alta. Es una cosa que te vuela la
cabeza. Eso estaría bueno, creo que podría ser eso.
Pero si no, yo no me voy a hacer mucho problema
tampoco. Tratamos eso, pero está todo bien igual,
sino te frustrás, porque el camino es muy difícil,
pero es así.
¿Qué banda nacional te gusta de las que están sonando
ahora?
Yo soy un tipo muy cerrado... ¡Ja, ja, ja! No, de acá
siempre me gustó, qué se yo, Divididos, Riff, algunas cosas de La
Renga, La Mancha de Rolando...
en general bandas de rock. No las bandas tipo Los
Piojos, que por ahí mezclan rock con murga,
o rock con candombe... esas cosas... si es candombe
es el Negro Rada, y bárbaro, pero
alguna mezcla no me llama la atención, no es mi
sonido. Aparte lo que a mí me gusta son las canciones,
la composición dentro de Dr. Rock son temas que
vos podés agarrar la criolla y tocarlos. Porque
de última de lo que vos te acordás no es el solo
de guitarra..., vos te acordás de la canción. Y
lo que me gusta escuchar es eso, una buena canción.
Y tanto en letras como musicalmente ¿Tienen un hilo
conductor, hay un mensaje?
En el disco Yo ya oí,
se dio como un hilo conductor, que era la propuesta.
Hay un tema que dice “Nada cambiará si vos no cambiás”,
después hay otro que dice “Algo tiene que cambiar...”,
esa frase se repite en varios temas, pero de casualidad,
después descubrí que era como una propuesta de ir
hacia adelante. Pero no es algo pensado.
También escribís letras.
En este disco hay una que la compuse en la época de los
cacerolazos, que se llama “Murmullo de lucha”...
pero después, en general no. La idea era que yo
hiciese la música y el cantante hiciese las letras,
porque él escribe bien, tiene muy buenas imágenes
puestas en palabras, yo soy más llano. Ponele, tenemos
una que dice “Bolsillo de cerveza, paladar de champagne”,
el pibe que aspira pero en el bolsillo hay dos monedas
¿No? Ese es mi tipo de poesía, más tanguera digamos.
Igual yo compongo la música antes que la letra.
Y después voy tirando frases, voy anotando... Cuando
llegó el momento trato de que cierre todo.
Ya que hablás de los cacerolazos, en 20 años o más
dedicados a la música, la política -o los políticos-
¿Fueron afectando de alguna manera tu carrera?
Si bien el rock estuvo prohibido... no prohibido pero
nunca fue bien visto, siempre las racias caían en
los recitales de rock.
De hecho se lo sigue asociando con drogas...
Claro, aunque todos sabemos que son palomitas blancas
al lado de los pescados gordos de verdad. Pero bueno,
lo que pasa es que quizás esa “persecución” en aquella
época creaba una sensación de hermandad entre la
gente que hacía rock y que iba a ver rock. Vos te
cruzabas con alguien en la calle, y había una mirada
de complicidad. No me acuerdo bien por qué, pero
había como una identificación entre el público rockero
y el músico rockero.
Eras del palo...
¡Eras del palo! ¡Claro! Había como una comunión, o sea,
el tipo que iba a ver a Porchetto,
por decirte algo bien blando, era el mismo que iba
a ver a Polifemo, con David
Lebón, que era un rock más pesado. Pero
era el mismo público digamos, después la cosa se
empezó a diversificar más, empezó el heavy de verdad
con V8..., Ricardo Iorio era plomo nuestro, el primer show lo hizo con nosotros,
acá en... creo que era en Excursionistas de Belgrano,
acá en Barrancas. Y después bueno, con Ricardo nos
volvimos a ver cuando nos juntamos con la banda.
Al primer show de la banda vino él, en el 99.
Y como que había entonces una comunión entre la
gente del rock ¡Los militares hicieron eso a favor!
Pero no, en general en mi caso, la política siempre
la viví como ciudadano normal. Nada en especial.
Cuando no hacés música, ¿Qué hacés para divertirte,
para reirte de algo?
Es que en realidad para mí no es trabajo. ¡Yo sufro cuando
nos vamos de vacaciones a Mar del Plata! Por ahí
son 20 días o más que no agarro la guitarra, y ¡Me
aburro como una ostra! Yo en realidad tengo la suerte
que todo lo que hago no es un trabajo. Por suerte
gano plata con lo que hago, pero para mí el trabajo
es lo mismo que la diversión.
¿Los planes para lo que sigue?
Los planes de la banda... Ver si para mayo sacamos el
nuevo disco, preparar un video... y seguir. Y vamos
a apostar un poco más a la difusión, vamos a centrar
un poco el asunto en hacernos ver a nosotros como
banda, que no va por ahí atado a tocar más, sino
a hacernos más visibles en los medios. Y a tratar
de unir un poco más mi nombre con el de la banda.
Porque en general en los shows anunciamos Dr. Rock – Marcelo Roascio. Tratar de unir
eso, que Dr. Rock sea Dr. Rock.
Fernando Puente
Marzo 2004
www.laopiniondelagente.com.ar |